¿Sabías que durante el embarazo se produce un aumento de la producción de las hormonas tiroideas maternas para dar respuesta a las necesidades del feto? Las hormonas tiroideas son cruciales para el desarrollo normal del cerebro y del sistema nervioso del bebé. Durante los primeros 3 meses de embarazo, el bebé depende del aporte de la hormona tiroidea de la madre, que llega a través de la placenta. Esta demanda puede suponer una alteración en la función de la glándula tiroides, la cual podría interferir en el correcto desarrollo y crecimiento del bebé, por lo que es importante que las hormonas tiroideas de la madre estén en niveles adecuados.
Por ello se recomienda realizar un control de la función tiroidea en todas las gestantes, avalado por las Sociedades Españolas tanto de Endocrinología y Nutrición (SEEN) como la de Ginecología y Obstetricia (SEGO). La primera determinación de hormonas tiroideas debe realizarse entre la semana 7 y la semana 12 de gestación.
¿Qué parámetros analíticos deben analizarse?
De manera general es suficiente con determinar la hormona tirotropina o TSH. Además, en algunos casos está indicado determinar la inmunidad tiroidea mediante los anticuerpos antiperoxidasa o TPO, sobre todo en las mujeres que presenten un mayor riesgo, como son, entre otros, las situaciones de infertilidad o abortos previos. Otras determinaciones como la T4L se indicarán de manera individual, teniendo en cuenta la situación de cada paciente.
La alteración tiroidea más frecuente durante el embarazo es el hipotiroidismo subclínico, que consiste en la detección de valores de TSH entre el valor superior de la normalidad y 10. Valores superiores a 10 indicarían un hipotiroidismo clínico.
¿Qué debo hacer si ya he sido diagnosticada de hipotiroidismo previo al embarazo?
En el caso de mujeres que ya se encuentran en tratamiento por hipotiroidismo, debe tenerse en cuenta que es probable que requieran un aumento de dosis de su tratamiento habitual. Por lo tanto, se recomienda solicitar una valoración médica en el momento en el que se planifique la búsqueda de embarazo, para poder llevar a cabo un seguimiento clínico estrecho.
¿Está indicada la suplementación con yodo durante el embarazo?
El yodo forma parte del proceso de formación de las hormonas tiroideas. Es por ello que durante el embarazo aumentan sus requerimientos. Obtener un adecuado aporte de yodo a través de la dieta (los alimentos con mayor aporte son la sal yodada, los lácteos o el pescado) resulta complicado en nuestro medio, por lo que habitualmente es necesario aportar suplementos de yodo.
Se recomienda iniciar dicho aporte de manera preconcepcional y mantenerlo durante todo el embarazo, así como en el periodo de lactancia en los casos en los que la fuente principal de alimento del bebé sea la lactancia materna.